La luna mengua y esta noche no llueve. Te desesperas, te impacientas, te frustras. Tendrías que pensar en otra cosa y dejar que pase lo que pase; pero verla titubeante o concentrada, suspirando o mordiéndose el labio es realmente angustiante. Te inquietas; pero y qué puedes decir? Qué puedes hacer? Tratas de ignorarla, de hacer como que no está ahí, en frente, contemplando tus vacíos, tus renglones limpios. Tratas de no ver la compulsión en sus ojos desvelados, su desilusión por otra noche despilfarrada y desperdiciada, su frustración ante la carencia de lluvia, de latidos, de trazos. Tratas de no oír los suspiros fallidos que insisten en el aire, el sonido que hace con los labios cuando les busca voz, el palpitar del lapicero azul entre sus dedos impacientes, las vibraciones de los electrones traspasándole la piel. Cómo ignorarla si está sobre la noche, sobre la luna menguante, sobre el aire silenciado de este febrero helado. Cómo ignorarla si te ha buscado, y no solo eso, te ha provocado, te ha contagiado esa bendita, divina, deliciosa sed de tinta. Cómo ignorarla si ahora tú quieres ser lo ella quiere que seas: un lienzo magnífico, un océano espléndido, un universo suntuoso y secretamente al descubierto.
Esta noche no llueve y ella quiere ser río, vendaval, terremoto o aunque sea soplido; quiere ser verbo único, cualquier tipo de adjetivo, cierra los ojos y ya no quiere ser sustantivo. Esta noche no llueve y ella quiere que seas resultado, recompensa; el lapicero es promesa y tú tienes que ser desenlace, consecuencia.
Se rinde. Esta noche, otra vez, no llueve. Se despide del lapicero y de su encendido azul ilusionado, ahora casi estéril y decepcionado. Se despide de la noche muda y de tus blancos renglones vacíos, desiertos, desolados. Esta noche no llueve, es un hielo pero no llueve.
Esta noche no llueve, no caen palabras del aire, ni tinta, ni sueños, ni lunas menguantes.
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11 comments:
Yo quiero un cuaderno que hable como ese.
Me gusta Sol; cuando escribes que no te sale nada, no puedo separar mis ojos de tus palabras.
Cuando sales a pasear con una persona impuntual que no te llevara a la toscana, ni siquiera te acompañara a casa me noqueas.
Beso de noche con lluvia
cada vez que me tiendo ante el prado infinito de la pagina en blanco pasa lo mismo. maravillosas tus palabras, gracias.
Hola Sol, una vez más aparece ella..., disfrazada de infinitas formas,
Un abrazo
Linda!!! Tal vez esta noche tampoco llueva, pero sigue esperando esas palabras que seguro aparecerán... siempre lo hacen!!!
Un abrazo!!!
Las musas, a veces están de vacaciones.
Por lo que sugiero... esperar...
Con cuadernos como ese pocas páginas en blaco podras cosechar, si no es hoy será mañana, y ante las palabras brotadas algún dique tendras que colocar
Me gusta cuando haces de tu problemas a la hora de escribir un tema mas.
muy buena historia....aca en mi ciudad tambien queremos que esta noche no llueva, porque la ultima vez un poco mas y se lleva nuestro puente....
¡Qué hermosas son tus gotas de lluvia! Sin duda escondería todos los paraguas del mundo para que empaparas prados y ciudades.
Besos
No llovieron las tintas azules, pero no por eso dejaron de caer unas gotas exquisitas, aunque sean solo para dejar constancia de la queja por la ausencia de la lluvia estremecedora. Ya llegará.
Abrazos.
¿Estás segura de que no llegó la inspiración? De cualquier manera, su ausencia a tí no te deja sin palabras.
Un abrazo.
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