Monday, March 3, 2008

En cada latido

Tu corazón es un músculo; pero seguramente ya sabías eso, no? Es un músculo estriado hueco envuelto completamente en el pericardio. Cada uno de tus latidos forma un ciclo de eventos llamado ciclo cardíaco. Cada ciclo cardíaco consta de una contracción y una relajación muscular que se repite aproximadamente 75 veces por minuto.

Tu corazón, así como el mío, se divide en 4 cavidades: dos cavidades superiores llamadas aurículas y dos inferiores llamadas ventrículos. Tu sangre, conformada entre otras cosas por eritrocitos, leucocitos y plasma, se pasea por tu corazón, entre aurículas y ventrículos y visita todas las esquinas de tu cuerpo gracias a tus latidos. Tu aurícula derecha, como sabrás, se relaja y al relajarse recibe, por medio de tus venas cavas, la sangre proveniente de todo tu cuerpo, sangre impregnada de dióxido de carbono y otros deshechos. La sangre fluye desde tu aurícula derecha, cuando esta se contrae, a tu ventrículo derecho, cuando este se relaja. Inmediatamente después, tu ventrículo derecho se contrae y dispara la sangre hacia tus pulmones por medio de la arteria pulmonar, donde los átomos de hierro, enredados entre las ramas de toda la hemoglobina que reside en tus células rojas, se abrazan a cuantas moléculas de oxígeno puedan antes de introducirse a tu aurícula izquierda. Tu aurícula izquierda se relaja entonces y recibe la sangre oxigenada que regresa de tus pulmones a tu corazón, y al contraerse, la manda a tu ventrículo izquierdo, considerablemente más poderoso que el derecho. Lo sabías? Las paredes de tu ventrículo izquierdo son el doble o el triple del grosor de las paredes del derecho. Tu ventrículo izquierdo ahora se relaja para recibir la sangre oxigenada y luego contrae sus gruesísimas paredes y expulsa, por medio de la arteria aorta, la sangre oxigenada a todos los rincones de tu cuerpo. Más o menos cada 60 segundos, todas y cada una de las células de todos los órganos de tu cuerpo reciben oxígeno gracias a los latidos de tu corazón.

Tu corazón es un músculo miogénico; te explico: significa que a diferencia de otros músculos esqueléticos, tu corazón no necesita de un estímulo externo, como del cerebro, pues se estimula a sí mismo. A parte de otros sorprendentes y mágicos atributos, tu corazón tiene esta increíble capacidad de autoestimulación que es coordinada por tu sistema nervioso autónomo. Las secuencias de las contracciones de tu corazón se producen por una despolarización que ocurre en las membranas de tus células cardíacas, y esta despolarización da lugar a un potencial de acción. Este potencial de acción es un impulso eléctrico que se genera en tu nódulo sinusal, una pequeña masa de tejido especializado que se encuentra en la parte superior de tu aurícula derecha. Tus células cardíacas están comunicadas de tal manera que forman una magnífica red de conducción, y el potencial de acción se propaga por todas ellas. La corriente eléctrica producida por la despolarización, o sea, el potencial de acción, se transmite a lo largo de tus dos aurículas primero, estas se contraen y luego se estimulan tus ventrículos, y entonces estos se contraen. Cada contracción de tus ventrículos representa un latido tuyo. Este sistema de conducción eléctrico explica la regularidad de tu ritmo cardíaco y asegura así la coordinación de tus contracciones auriventriculares. Fascinante, no? En cada uno de tus latidos, tus aurículas se contraen una fracción de segundo antes que tus ventrículos, ya que la sangre recibida por tus aurículas tiene que ser vaciada a tus ventrículos antes que estos se contraigan para después ser expulsada ya sea a tus pulmones o al resto de tu cuerpo. Todo esto en cada latido tuyo.

Es por eso que late tu corazón. Lo sabías? Mi corazón en cambio, late solamente porque existes tú.


Imagen: I have your heart with me, Esmeralda

20 comments:

Soy ficción said...

Que belleza, me cortaste la respiracion con la ultima frase. Me gusta que tu corazon solo lata por su existencia, no podia ser de otra manera.

Yahuan said...

Mi corazón tampoco late por todo eso ... creo. En sí debería latir así, pero como es evidente tenía que pasar que un corazón entre cinco millones y tres cuartos de millón se volviese loco, y esa suerte o desgracia le tocó al mío ..., creo. Bueno, aunque tal vez sea que mi corazón se anda muriendo.

Un gran abrazo!!

Sebas said...

El amor en busca de suspenso. Como me gusto esto. Andamos de elogios cruzados.

jorge said...

A la mitad de tu descripcion de la fisiologia cardiaca, mi corazon empezo a later mucho mas despacio de lo normal.
Cuando llevaba las tres cuartas partes, estaba casi paralizado...estaba claro que este escrito no podia ser un tratado medico. Estaba claro que debian aparecer "esas" palabras al final.
Y al llegar al termino del escrito: ¡Estaban!
Mi corazon volvio a latir con normalidad.

rocahemu said...

La anatomía es sólo el principio que delimita la inmensidad del corazón humano..
M gusto navegar por estos lugares..
Un saludo;)

Cazadora de almas said...

Mi corazon late por todo!!! Besitos!

Elmo Nofeo said...

A ver si me explicas porque mi corazón se acelero al llegar al párrafo "mi corazón en cambio, late sólo por ti".

Bonito post, ¿me lo puedo copiar?

Un beso

Juan said...

vaya coincidencia. :)agradable coincidencia.Mi corazón late.

F. Fabian S. said...

Querida amiga...siempre sorprendiendo...

Mario said...

Ja,ja,ja,ja... Es como cuando te hablan de la respiración, y te vuelves tan conciente del mecanismo que uno empieza a inspirar y exhalar mecánica y concientemente, temiendo ahogarse por si te olvidas respirar. Luego, le metes una inspiración profunda, fuerte, para estar seguro de que sigues vivo. Luego, expiras mientras escribes. La respiración continúa sola. Luego se detiene... Es casi mágico. Y vuelve a empezar. Como todo en la vida.

Que hermoso post.

Un abrazo,

Evora said...

Increíble!

Hermoso
Dulce
Preciso


Un abrazo Sol

JúpiteR said...

ke lindoOoO..^^

Señor De la Vega said...

Mi señora,
Líneas y líneas de investigaciones resumidas, de conclusiones apoyadas en siglos de auto-conocimiento humano.
Párrafos de hermosa ciencia, de preciosa biología, de maravillas de la naturaleza que conforman nuestro organismo.
Palabras, técnicas y precisas, terminología creada para evitar lo ambiguo del humano acervo.

¿Y usted, con una línea de poesía, condiciona convencida, el motor de nuestra vida a la existencia de la persona amada?

La humanidad nace en la locura, de un soplo al corazón. No se cure nunca Sol.

Visitando su genial balcón, solo puedo abandonarlo, con la tristeza de un admirador incondicional a su talento. Le saludo humildemente, Z+-----

George said...

yo tengo el corazón de piedra.

Mabel Pérez Carranza said...

Yo quisiera que latiera de nuevo así, y no saber que late en la "aventura" de vivir.
Te abrazo Sol,

YEL said...

Hola Sol,

Es muy interesante como combinas la ciencia con la literatura. Me gusta eso.

Un gran abrazo.

Pilar M Clares said...

Se olvida lo propio, tiene su belleza, sí.
Saludos

Ceci said...

Cuanta información dentro de un post!

Una forma bien interesante de explicar como vivimos sintiendo cada latido.

Beso!

AnyGlo said...

Lo has dicho... SORPRENDENTE!!!

Mariposa said...

Ayyyyyyyyyyyy siiii jajajajaja todo lindo esoooo =D
cuánta verdad hay en esas letras...
realmente es mi cerebro el que lo piensa y quiere amar... pero el corazón también es re acelerado jejeje
muchos besos mi nena SOL

Tarde pero acá ando leyendo eh?